EDUCACIÓN EMOCIONAL BASE PARA EL APRENDIZAJE

 Profra: Olivia Cecilia Salado Muñoz, Directora de primaria del Liceo del Valle de Toluca.

MCF. Marlen Saray Romero Serrano, Psicóloga de primaria del Liceo el Valle de Toluca


“Educar la mente, sin educar el corazón, no es educar en absoluto.” Aristóteles   (2002). [1] Esta afirmación de Aristóteles, enfatiza la relevancia de la educación emocional para el desarrollo del hombre, la cual fue descubierta por los filósofos griegos[2] : Platón, Sócrates, Epicteto, Protágoras, entre otros. A pesar de no ser algo nuevo, en las últimas décadas ha tomado mayor relevancia sobre todo para la construcción de ambientes estimulantes para el aprendizaje.

 Las circunstancias que enfrentamos debido a la pandemia promueven el desarrollo de competencias socioemocionales que ayudan a fortalecer los vínculos que nuestros estudiantes establecen entre ellos y con los adultos de su entorno. El apoyo del colegio resulta indispensable, pues el desarrollo socioemocional es una de las piezas centrales de la experiencia escolar incluyendo y enfatizando el rendimiento académico y la salud mental.

 

¿Qué es el aprendizaje socioemocional?

Cohen (2003[3] ) define el aprendizaje socioemocional como el aprendizaje de habilidades, conocimientos y valores que aumentan la capacidad de los niños de conocerse, tanto a sí mismos como a los demás, con el fin de usar esa información para resolver cualquier  situación con flexibilidad y creatividad.

 

7 grandiosos beneficios de la educación emocional:

 

💗 Mejora el autoconocimiento y la autoestima.

💗  Potencializa valores como la empatía, respeto y responsabilidad entre otros.

💗  Fortalece la salud mental.

💗  Orienta hacia la búsqueda de un sentido personal.

💗   Enriquece la proyección profesional.

💗  Relaciones interpersonales satisfactorias.

💗  Incrementa la felicidad y el bienestar.

 


Ahora bien, para el especialista en Orientación Psicopedagógica, Rafael Bisquerra, la educación emocional es un constructo que abarca la formación integral de la persona. Cabe citar entonces, a Daniel Goleman quien asegura que, “El 80% del éxito en la vida de las personas tiene que ver con el desarrollo de habilidades emocionales”.

 La prestigiosa entidad estadounidense denominada CASEL (Collaborative for Academic, Social and Emotional Learning)  propone un modelo de 5 competencias emocionales:

 

1.      Autoconciencia

2.      Autogestión

3.      Conciencia social

4.      Habilidades para relacionarse.

5.      Toma responsable de decisiones.

 



Desde esta perspectiva, se puntualiza que los estudiantes no aprenden solos, sino con el apoyo de sus profesores y en la compañía y colaboración de sus padres. En el ámbito familiar, la actitud, visión, y los propios estados emocionales que caractericen a los padres constituyen una influencia directa sobre los alumnos que beneficiará o no, su experiencia de aprendizaje.

 Es evidente el reto que enfrentan las instituciones educativas al adaptarse no sólo a las nuevas plataformas y herramientas virtuales, sino también al incluir en sus programas curriculares las esferas propias de la educación socioemocional y, desde este plano, enriquecer el proceso de aprendizaje y mayormente importante el desarrollo integral de sus alumnos. En la misma línea, el reto como padres es informarse y formarse en la educación emocional que beneficie la intimidad familiar, generando vínculos que permitan la adquisición de herramientas que los preparen para los retos que la vida actual exige.

 Con lo anterior se plantea que el bienestar de las personas no sólo considera el ámbito cognitivo, como anteriormente se creía, sino que va más allá, integrando los distintos ámbitos del bienestar: el físico, emocional, intelectual, espiritual y social. En conclusión, el mayor bienestar reside en acciones comprometidas a favor de bienestar de los demás.  En palabras de Bisquerra  (2009):

 

“El compromiso en la construcción del bienestar social es el principal proveedor de bienestar personal”.


 A continuación, se describen algunas estrategias de índole socioemocional para padres e hijos, que sin duda, te ayudarán a influir positivamente en el aprendizaje escolar:


1.- Entrenar la atención y aprender a calmarnos.

Se trata de colocarte en una posición cómoda y enfocar tu atención en tu respiración. Inhala y exhala, al tiempo que piensas en los momentos que te producen calma. Elige y construye el escenario mental que te genere tranquilidad. Finalmente, mueve un poco tu cuello, tus hombros o simplemente permite que tu cuerpo se mueva en la calma que le has permitido. Realiza el ejercicio cada que lo necesites.

 

2.- Genera bienestar

Trae a tu mente una situación que sea un problema o te cause conflicto con los demás. Enseguida haz un esfuerzo y obsérvate en la situación, detecta qué sientes, qué piensas y cómo reaccionas. Ahora, tal y como hilos de títeres, imagina que puedes cambiar tu expresión emocional por una de mayor bienestar para ti. El propósito es ejercer tu poder sobre las emociones y a la vez moldear tus habilidades. Recuerda que dependiendo de cómo te vincules con las situaciones es como interpretas lo que sucede. Busca soluciones desde el bienestar.

 

3.- Aprender no es memorizar. Enseña habilidades para la vida.

Según Bisquerra (2016), la regulación emocional, enfocar y mantener la atención, aprender a relajarse y saber escuchar, son situaciones que se adquieren en el proceso de aprendizaje. Para ello, define un horario fijo para la tarea, elimina distracciones del lugar de trabajo, muestra una actitud positiva y alegre. Si no disfrutas la hora de las actividades escolares, es probable que tu hijo muestre una actitud totalmente negativa al momento aprender.

 

4.- Impulsa su aprovechamiento escolar

Apoya una actitud positiva ante el aprendizaje virtual. Es evidente que nadie eligió este esquema de trabajo, solo es la manera en que todos enfrentamos la situación actual y la forma en la que nos toca aprender y enseñar. Si la actitud de los padres favorece con comentarios respetuosos al colegio y docentes de los alumnos, mayor y mejor será el aprovechamiento de tu hijo. En este sentido. y de acuerdo con la edad de tu hijo, supervisa su trabajo en las clases virtuales, indaga acerca de lo aprendido, checa sus apuntes o charla con él acerca de que hace para enfocar su atención y dar seguimiento a las actividades escolares.

 

5.- Expresar y hablar

Elige un momento con tu hijo o hija, para platicar sobre tus intereses, alguna inquietud, lo que te alegra o preocupa, de acuerdo con la edad que tenga, háganlo de preferencia sin aparatos electrónicos (ipad, laptop, ipod, tv, celular). Lo anterior, es una buena estrategia que permite que tu hijo exprese qué guarda en su corazón o que inquieta su mente. Expresar emociones y sentimientos es el primer paso para la gestión y modulación emocional, de este modo se da lugar a las emociones que facilitan y apoyan el aprendizaje. En esencia, las emociones como el miedo, enojo o frustración bloquean el proceso de aprendizaje.

 Al llevar a cabo estas estrategias, se genera un ambiente propicio para que gestionar de forma adecuada las emociones que nos ha traído la pandemia; entonces nuestros alumnos estarán fortaleciendo sus procesos de aprendizaje y su rendimiento académico va a mejorar; además, de saldrán beneficiados y fortalecidos de las condiciones que actualmente se presentan.




Referencias:

📗Aristóteles citado en: Filella, G., Ribes, R., Agulló, M. J. & Soldevila, A. (2002). Formación del profesorado: asesoramiento sobre educación emocional en centros escolares de infantil y primaria. Educar

📗Bisquerra, R. (2009). Psicopedagogía de las emociones. España: Síntesis.

 📗Bisquerra, R. (2016). 10 Ideas Clave. Educación Emocional. Barcelona: Grao.

 📗Cohen, J. (2003). La inteligencia emocional en el aula. Proyectos, estrategias e ideas. Buenos Aires: Troquel.

 

 

 


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